Deja de ser jefe y conviértete en un líder armando tu equipo de alto rendimiento

Cuando un negocio comienza a prosperar, las labores de un jefe también aumentan, resultándole imposible poder cumplirlas todas a cabalidad. Por lo mismo, cuando eso ocurre, va siendo hora de que delegue un equipo de sus trabajadores de confianza para que puedan ayudarlo a cumplir con los requerimientos. ¿Eso es malo? En lo absoluto. Al contrario, ese tipo de decisiones demuestran al personal que si son tomados en cuenta y que si es esfuerzan, también obtendrán altos cargos dentro de una organización. Entonces, ¿dónde entra el gran “pero”?

Sucede cuando el jefe quiere tener el control absoluto de todo. Algunos son fanáticos de eso, su negligencia los nubla al no querer que otro al que antes miraba sobre sus hombros pueda ser un “igual”.  Temen que otros tomen decisiones de forma independiente o que sus propuestas sean mejores que las suyas. Pero debe saber: delegar de manera efectiva puede ayudarlo a alcanzar sus objetivos más rápido.

Dicho esto, si usted es dueño de un negocio y está tratando de construir un equipo exitoso de alto rendimiento, debe comprender a su gente. Primero, conversando con ellos, escuchando como se sienten trabajando para usted y para la empresa. Conocer sus objetivos, deseos, lo que les impulsa y apoyarlos. Solo cuando sepa las respuestas a este tipo de preguntas, sabrá cómo manejar a su equipo de alto rendimiento. 

Compartiendo tu pasión

Contratar personas con la misma mentalidad será de beneficio para ambos,  porque esas son las personas que trabajan juntas para alcanzar el mismo objetivo. No obstante, conseguirlo no es tarea fácil. Por lo general, la gente va y viene. La mayoría de las organizaciones contratan a personas que trabajan en horarios establecidos y renuncian si están insatisfechas o infelices. 

La clave para responder por sí mismo es: ¿estás listo para ser tu propio jefe? Si tiene esta mentalidad anormal de control, solo atraerá la atención a los empleados de bajo rendimiento. Por lo tanto, como emprendedor, debe soltar cierto control para comenzar a construir un equipo fuerte, incluso si se sitúan en medio de una crisis global como la actual, protagonizada por el coronavirus.  

Involucre a su equipo con su visión

Lo primero que debes tener es una visión. Como líder, no podrás inspirar a nadie sin una visión clara, un punto de llega. Como en el mar, un equipo no responde si su capitán no sabe hacia dónde va. Ahora, cuando tiene una visión, debe compartirla constantemente con su equipo y recordarles por qué trabajan para conseguirlo. Puede ser un beneficio colectivo, no hay problema con eso. 

Los líderes de pies fríos no lo logran      

Si no está seguro acerca de su visión, es mejor que no la comparta. Lo único que desea compartir con su equipo en todo momento es una confianza imparable e inquebrantable. Debe desarrollar la autodisciplina, por lo que sí está dudoso evidentemente eso se reflejará en su personal de confianza. Construya una visión y desarrolle una mentalidad fuerte. Tu mentalidad es la clave del éxito. 

Establecer un equipo impulsado por la cultura

Lo que conforma tu cultura es tu valor. Ahora que tiene su visión y misión, el tercer pilar de su equipo es el valor de su empresa. ¿Qué representas? El hecho de que trabajen en diferentes departamentos no quiere decir que sus objetivos sean diferentes. Todos van hacia una misma meta, y su valor es el compañerismo y la unión, entonces explótalo y hazlo saber al personal. 

Discutimos, aprendemos, peleamos y luego volvemos al trabajo al día siguiente. Evidentemente, ningún trabajo se salva de esos problemas, pero no hay nada mejor que ver como todo vuelve a la normalidad a la mañana siguiente. No se puede estar de acuerdo todos los días, pero como dicen, se requiere de esos momentos de fricción para relucir aquellas falencias que pueda tener la organización.

Evite la ganancia personal

Si eres un emprendedor de estilo de vida, será difícil crear un equipo de alto rendimiento. Mucha gente dirá: “Quiero trabajar desde casa y solo quiero ganar suficiente dinero trabajando desde casa”. O  “Puedo elegir mi horario de trabajo cuando trabajo desde casa” ¿Pero es esta una visión adecuada? ¿Misión? ¿Qué tipo de cultura construye esto? Esto se trata de usted y sus necesidades, pero ¿dónde están los miembros de su equipo? ¿Qué tipo de cultura te esfuerzas por cultivar? 

Las grandes cosas inspiran a millones 

Cuando Bill Gates dijo que iba a poner una computadora personal en cada hogar de América del Norte, presentó una visión irresistible. Con mucha determinación de su equipo de alto rendimiento y él mismo como líder, lograron su visión. Ahora, piense que a pesar de que les llevará de 5 a 10 años o 20 años lograrlo, ese es un gran objetivo para mirar hacia adelante y trabajar. Lógicamente, en ese proceso ya debes de estar cosechando tus propias ganancias, no esperar a terminar el viaje para recién ver los resultados. Si piensas así, entonces tu equipo no te acompañará todo el viaje. 

Ser sincero con los empleados 

Trabajar en equipo puede ser algo cansado, sobre todo durante el proceso de adaptación de los tiempos. Pero, como líder tampoco puedes darte el lujo de tolerar mucho tiempo. Debes de ser sincero, darles plazos y no solo depender de su “buena voluntad”. Si están dispuestos a aceptar eso y si eso es lo que quieren también, prosperan a la excelencia. Sus talentos se expanden y fortalecen y nuestro equipo se supera a sí mismo constantemente. 

Dicho esto, es importante mencionar que solo ciertos tipos de personas prosperan bajo presión. Tienen altos estándares para ellos mismos. Este es el tipo de personas a las que nuestro equipo presta especial atención. Cuando sabemos qué impulsa a nuestros mejores artistas, también sabemos cómo inspirar y organizar al resto. 

Haz realidad el sueño de tu equipo

Cuando sabes lo que puedes hacer por tu equipo y los ayudas a hacer realidad sus sueños, obtienes lealtad. Cuando eres sincero con tu equipo, ellos confiarán más en ti. Pregúnteles acerca de sus objetivos personales y profesionales y hábleles sobre cómo puede hacer que eso se haga realidad. Su misión y la de ellos deben alinearse, pero sus expectativas y sus realidades también deben alinearse para que su equipo esté satisfecho. Sueña en grande y gestiona las expectativas con cuidado.

Líder de alto rendimiento crea energía y entusiasmo

Es más un efecto de atracción que de empuje. Los líderes con el equipo de alto rendimiento deben saber cómo generar energía y entusiasmo. Si lo hace bien e inspira a las personas a comprometerse, pensarán en cómo agregar más valor. 

Como buen líder de alto rendimiento, debe mantener a su gente inspirada y recordarles que están en una misión. Debes ser un gran comunicador. Alguien que entiende a las personas, su psicología y que puede hacer que hablen sobre sus luchas y sus sueños. Cuando logras inspirar a otros, atraerás un talento increíble: las personas con talento quieren seguir a un buen líder.

Reflexiones finales sobre la creación de un equipo de alto rendimiento 

Como mencioné al principio, cuando su negocio crece, no puede hacer todo usted mismo. Entonces, un buen líder que sabe cómo optimizar la gestión de tareas y delegar de manera efectiva. Si puedes ser un líder inspirador y convincente, no tendrás ningún problema para atraer talento. Siempre tendrá personas que quieran trabajar con usted. Las personas que trabajaron dentro de la empresa: todos se ayudan mutuamente y son muy solidarios. Como dije, a veces discutimos y peleamos, pero al día siguiente, todos volvieron a la normalidad.